ACCIDENTE CEREBROVASCULAR

Accidente Cerebrovascular.

Derrame cerebral, ACV

¿Qué es?

El accidente cerebrovascular es una enfermedad caracterizada por inicio agudo de un déficit neurológico (disminución de la función) que persiste por lo menos 24 horas, reflejando envolvimiento focal del sistema nervioso central como resultado de un disturbio en la circulación cerebral; empieza abruptamente, siendo el déficit neurológico máximo en su comienzo, pudiendo progresar a lo largo del tiempo.

El término ataque isquémico transitorio (AIT) refiérese al déficit neurológico transitorio con duración de menos 24 horas hasta el total retorno a la normalidad, cuando el déficit permanece más de 24 horas hasta el retorno a lo normal es denominado déficit neurológico isquémico reversible (DNIR).

Podemos dividir el accidente cerebrovascular en 2 categorías:

El accidente vascular isquémico consiste en la oclusión de un vaso sanguíneo que interrumpe el flujo de sangre a una región específica del cerebro, interfiriendo con las funciones neurológicas dependientes de aquella región afectada, produciendo una sintomatología o déficit característicos.

En el accidente vascular hemorrágico existe una hemorragia(sangría) local, con otros factores agravantes tales como aumento de la presión intracraneana, edema (hinchazón) cerebral, entre otros, llevando a señales, ni siempre, focales.

¿Cómo se desarrolla o se adquiere?

Varios factores de riesgo son descritos y están comprobados en el origen del accidente cerebrovascular, entre ellos están: hipertensión arterial, enfermedad cardiaca, fibrilación atrial, diabetes, tabaquismo, colesterol alto. Otros factores que podemos citar son: uso de píldoras anticoncepcionales, alcohol, o otras enfermedades que acarrean aumento de la coagulación de la sangre del individuo.

¿Qué se siente?

Generalmente va a depender del tipo de accidente cerebrovascular que el paciente está sufriendo: ¿Isquémico? ¿hemorrágico? Su localización, edad, factores adyacentes.

Debilidad

El inicio súbito de una debilidad en uno de los miembros (brazo o pierna) o rostro es el síntoma más común de los accidentes cerebrovasculares. Puede significar la isquemia de todo un hemisferio cerebral o apenas en una pequeña y específica área. Pueden ocurrir de diferentes formas presentándose por debilitad mayor en la cara y en el brazo que en la pierna o debilidad mayor en la pierna que en el brazo o en la cara o la debilitad puede acompañarse de otros síntomas. Esas diferencias dependen de la localización de la isquemia, de su extensión, y de la circunvolución cerebral acometida

Disturbios visuales

La pérdida de la visión de un de los dos ojos, principalmente aguda, alarma los pacientes y generalmente llévalos a procurar evaluación médica. El paciente puede tener una sensación de sombra o cortina al mirar o aún presentar ceguera transitoria (amaurosis fugaz)

Perdida sensitiva

El hormigueo ocurre más comúnmente con la disminución de fuerza (debilidad), confundiendo el paciente, la sensibilidad es subjetiva.

Lenguaje y habla (afasia)

Es común, los pacientes presentaren alteraciones de lenguaje y de habla, así algunos pacientes presentan habla corta y con esfuerzo, acarreando mucha frustración (conciencia del esfuerzo y dificultad para hablar), algunos pacientes presentan otra alteración de lenguaje, haciendo frases largas, fluentes, con poco sentido, con gran dificultad para comprensión del lenguaje. Familiares y amigos pueden describir al médico este síntoma como un ataque de confusión o estrés.

Convulsiones

En casos de hemorragia intracerebral, del accidente vascular hemorrágico, los síntomas pueden manifestarse como en los casos descritos arriba, generalmente más graves y de evolución más rápida. Puede ocurrir una hemiparesia (disminución de fuerza del opuesto a sangría), además de desvío de la mirada. El hematoma puede crecer, causar edema (hinchazón), atingiendo otras estructuras adyacentes, llevando la persona al coma. Los síntomas pueden desarrollarse rápidamente en cuestión de minutos

¿Cómo se diagnostica?

La historia y el examen físico dan subsidios para una posibilitad de enfermedad cerebrovascular como causa de la sintomatología del paciente. Entretanto, en el inicio agudo de síntomas neurológicos debe sugerir una molestia vascular en cualquier edad, mismo sin factores asociados. La evaluación de laboratorio incluye análisis sanguíneas y estudios de imagines (tomografía computarizada de encéfalo o resonancia nuclear magnética.) Otros estudios: ultrasonido de carótidas y vertebrales, ecografía y angiografía pueden ser hechos.

¿Cómo se trata y previene?

Inicialmente se debe diferenciar entre accidente vascular isquémico y hemorrágico.

El tratamiento incluye la identificación y control de los factores de riesgo, el uso de terapia antitrombótica (contra coagulación de la sangre) y endarterectomia (cirugía para retirada del coágulo de dentro de la arteria) de carótida en algunos casos seleccionados. La evaluación y el acompañamiento neurológico regulares son componentes del tratamiento preventivo bien como control de la hipertensión, de diabetes, supresión del tabaquismo y uso de ciertas drogas (anticoagulantes) que contribuyen para la disminución de la incidencia de accidentes cerebrovasculares.

El accidente cerebrovascular en evolución constituye una emergencia, debiendo ser manejado en ambiente de hospital.

El empleo de terapia antitrombótica es importante para evitar recurrencias. Además de esto, se deben controlar otras complicaciones, principalmente en pacientes acamados (neumonías, tromboembolismos, infecciones, úlceras de piel) donde la institución de fisioterapia previene y tiene papel importante en la recuperación funcional del paciente.

Las medidas iniciales para el accidente vascular hemorrágico son semejantes, debiéndose obtener una cama en una unidad de tratamiento intensivo (UTI) para control riguroso de la presión. En algunos casos la cirugía es obligatoria con objetivo de tentar la retirada del coágulo y hacer el control de la presión intracraneana.