DEPRESIÓN

DEPRESIÓN

Ana Galvão Abuchaim, MD. Especialista de la psiquiatría por la asociación brasileña de la psiquiatría (ABP). Claúdio Moogen Abuchaim, MD., especialista de la psiquiatría por la asociación brasileña de la psiquiatría (ABP). Sinónimos y términos relacionados

Desorden depresivo, depresión mayor, depresión unipolar, incluyendo aún tipos diferenciados de depresión, como depresión severa, depresión psicopática, depresión atípica, depresión endógena, melancolía, desorden afectivo estacional.

¿Que es?

La depresión es un desorden caracterizado por afectar el humor de un individuo, causando un predominio anormal de la tristeza.

Todas personas, hombres o mujeres, en cualquier edad, pueden ser atingidas por ella; sin embargo, las mujeres son dos veces más afectadas que hombres. En niños ancianos la enfermedad tiene características particulares, y su ocurrencia en ambos grupos es también frecuente.

¿Cómo se desenvuelve?

En la depresión como enfermedad (desorden depresivo), no siempre es posible identificar claramente qué acontecimientos de la vida llevaran la persona a entrar en depresión, diferentemente de las reacciones depresivas normales y de las reacciones depresivas de adaptación, en las cuales el acontecimiento de la precipitación se puede identificar.

Las causas de la depresión son múltiples; y una vez acumulados puedan desencadenar el desorden. Originase de aspectos constitucionales, genéticos neuro químicos (neurotransmisores del cerebro), asociados a l factores ambientales, sociales y psicológicos como Estrés.

Estilo de vida.

Acontecimientos vitales como crisis y separaciones conjúgales, muerte en la familia, climaterio, crisis de media edad, Entre otros.

¿Cómo se diagnostica?

En la depresión la intensidad del sufrimiento es intensa, durando la mayor parte del día por lo menos dos semanas, no siendo posible saber porque la persona está así. El más importante es saber cómo el individuo se siente, cómo continua organizando su vida (trabajo, las tareas domésticas, cuidado personal con la higiene, comiendo y con el vestuario) y cómo se está relacionando con la gente, para poder diagnosticar el desorden y empezar un tratamiento médico eficaz.

¿Qué siente una persona deprimida?

A menudo, un individuo deprimido se siente triste, sin esperanza, desalentado, abatido. Mucha gente que sufre de depresión, sin embargo, niega la existencia de tales sensaciones, que pueden presentarse de diversas maneras, como cólera persistente; ataques de rabia o de tentativas constantes de culpar a los otros, o aún con innumeras quejas de dolores a través del cuerpo sin causas médicas que las justifiquen. También, puede haber una pérdida de interés en actividades que previamente eran agradables al individuo, tal como actividades recreativas, pasatiempos, reuniones sociales y práctica de deportes. Estos acontecimientos dejan de ser agradables. Generalmente, el sueño y el comer también se alteran, y es probable ocurrir una disminución del apetito, o aún el contrario, su aumento, con pérdida o aumento del peso.

En lo que concierne a sueño, puede ocurrir insomnio, con el individuo teniendo dificultad en iniciar a dormir, o despertar en el medio de la noche, o más pronto que lo habitual y no poder volver a dormir. También es común las sensaciones de disminución de energía, cansazo y fatiga injustificables por cualquier otro problema físico

¿Qué piensa el individuo con depresión?

Los pensamientos que a menudo ocurren a la gente deprimida son los de sentirse sin valor, con culpabilidad excesiva, y la sensación de ser un perdedor, incluso debido a acontecimientos del pasado. Muchas veces cuestiones comunes, del diario, causan tales pensamientos en estos individuos. Mucha gente también experimenta dificultad en pensar, en concentrarse o tomar decisiones anteriormente habituales, sintiéndose incapaces de tomar decisiones o exagerando los efectos “catastróficos ” de sus decisiones, supuestamente incorrectas.

Pensamientos de la muerte o de tentativas suicidas

Con frecuencia, el individuo puede pensar mucho en muerte, en gente que ya murió l, o en su propia muerte. Muchas veces hay un deseo suicida, ocasionalmente con tentativas de matarse, pues el individuo cree que es la única “salida”, o con el propósito de “librarse” del sufrimiento, sentimientos causados por la propia depresión, conduciendo el individuo a culparse, a sentirse inútil o para se tener como una carga para los otros. Este aspecto hace con que la depresión sea una de las causas principales del suicidio, especialmente para la gente deprimida que vive solitariamente. Debemos recordar que la tendencia a aislarse es una consecuencia de la depresión, que genera un círculo vicioso depresivo que resulta en pérdida de esperanza en mejorar en las personas que no comienzan un tratamiento médico apropiado. Sentimientos que afectan la vida diaria y las relaciones personales.

Con frecuencia, la depresión puede afectar la vida diaria de la persona. Muchas veces es duro comenzar el día debido al desaliento y tristeza en despertar. Así, cuidar de las tareas habituales puede convertirse en una carga: trabajar, dedicarse a otra persona, cuidar de los niños, entre otras tareas, puede llegar a ser deberes penosos, o aún irrealizables, dependiendo de la severidad de los síntomas. Por lo tanto, la relación interpersonal puede tornarse perjudicada: las dificultades maritales pueden se acentuar, incluyendo una disminución del deseo sexual; el desinterés por amistades y convivios sociales pueden obligar al individuo que se aísle, hasta mismo haciendo difícil la busca por ayuda médica.

¿Cómo se trata la depresión?

El tratamiento médico es siempre necesario, el tipo de tratamiento dependiendo de la intensidad de los problemas causados por la enfermedad. Puede haber depresiones leves, presentando con pocos aspectos de los problemas descritos anteriormente, o puede haber depresiones bien más severas, perjudicando visiblemente la vida del individuo. De todas formas, las depresiones suaves o más severas necesitan de tratamiento médico, generalmente medicamentoso con (con antidepresivos), o psicoterapia o con una combinación de ambos, según la intensidad de la enfermedad y disponibilidad del tratamiento.